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Hay algunos residentes en Pedralbes que van al gym unas cuantas veces por semana, y claro, están petados. Hay algunos otros que no hacen deporte nunca, pero saben en el fondo que deberían hacer algo. Esos dos tipos de colegiales han encontrado por primera vez este año un espacio en común: el Club de Fitness. Surgido por iniciativa de Mauro (de la isla caribeña, Aruba) y Kyan (del país del chocolate y los relojes, Suiza), en el club de fitness se reúnen cada jueves y sábado durante media hora para hacer unas rondas de ejercicios siguiendo el entrenamiento de «hit». La idea de ese entrenamiento es hacer mucho en poco tiempo, y de forma muy intensa. Representantes del Club de Fitness nos aseguran que «los estudios avalan este método por ser muy eficiente». Los entrenadores son Mauro y Kyan, el primero trabaja de cintura para arriba, y el segundo, de cintura para abajo, «a grandes tiros», como dicen ellos. Eso se debe a que cada uno es experto en lo suyo. De hecho se bromea internamente sobre el asunto: «si quieres tener la espalda de Mauro y el culo de Kyan, apúntate al club de fitness».